MADRID

Última visita: Julio 2018

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Una de las últimas aperturas de Madrid y, de momento, parece que tanto crítica como público coinciden en que la propuesta merece mucho la pena.

Lo mejor del mar servido en un sitio fantástico, con una oferta que se divide en tres: barra, zona informal y restaurante, siendo todas muy recomendables.

Muy buen producto, tratado con mimo, donde destacan unas espectaculares anchoas de Laredo y una secuencia fantástica de almejas, zamburiñas y navajas. Además, unas ricas croquetas de merluza (aunque algo más de cremosidad sería bien recibida), una empanada magnífica (qué difícil es encontrar una buena en Madrid) y unos boquerones de 10.

Mención especial para los pescados a la brasa, con una oferta que se agradece que se salga de lo habitual (lenguado/rodaballo/besugo) y por lo cual la cuenta final no es tan elevada.

Postres caseros con un muy buen flan y una rica tarta de limón.

Buena bodega a precios comedidos, servicio profesional y atento y espacio de 10.

Por todo ello, un sitio que hay que conocer y de donde es complicado no salir contento.

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