VALENCIA

Última visita: Julio 2016

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Cuando uno prepara un viaje a Valencia tiene que tener muy claro que hay algunos restaurantes que son visita obligada. Este es el caso de Askua. Si se visita la ciudad del Turia resulta imprescindible ir a conocer la casa de la familia Gadea.

Una oda permanente al producto, al buen gusto, a las perfectas ejecuciones. Llevan la relación con los proveedores a otro nivel, consiguiendo los mejores productos a cambio de una fidelidad única.

Siempre digo que muy pocos restaurantes tienen una carta tan apetecible como la de Askua. Croquetas de rabo de toro, patatas bravas, cocochas, chuleta de Luismi. Una oferta aparentemente sencilla pero al mismo tiempo muy difícil de superar.

Un tipo de restaurante que, al que suscribe, le enamora por la sencillez de la propuesta y la perfección en su ejecución.

Y qué decir de Don Ricardo Gadea, la sala en mayúsculas. Si yo me quisiese dedicar al mundo de la sala, cogía mañana un AVE, me iba a comer a su restaurante y no dejaría de mirar y tomar notas de cómo ejerce este señor.  

No puedo finalizar sin hacer una mención sobre Askua Barra, la sucursal de Askua que han montado en Madrid Ignacio y Jorge Gadea. Allí, los hijos de Ricardo ofician con criterio siendo unos dignos herederos de la casa madre (o padre en este caso). No obstante, todavía tienen recorrido y hay algunas diferencias considerables, estando la casa valenciana un peldaño por encima.

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